Contenido de la comunicación

¿CUÁLES SON LOS ANTECEDENTES?

El comienzo de lo que actualmente se conoce como aula invertida (Flipped Classroom) parte de los profesores Jonathan Bergmann y Aaron Sams del instituto Woodland Park en Colorado, EE. UU en 2007 quienes grabaron presentaciones en PowerPoint y las publicaron en internet para aquellos alumnos que no habían podido asistir a clase. Estas lecciones se fueron ampliando y se propagaron rápidamente. Desde entonces, este tipo de metodología se ha ido implementado en numerosos ámbitos educativos, siendo “TrendingTopic” en multitud de ocasiones. La implementación de la metodología de aula invertida implica trasponer la entrega de contenido un tiempo antes de la sesión presencial y el aula de clase se reserva para actividades diseñadas con objeto de reintroducir y reforzar contenidos vistos previamente. Tal y como se plantea actualmente la enseñanza, el profesor deja su faceta de experto en contenidos, presentador y transmisor de información y se convierte, fundamentalmente, en un diseñador de medios, un facilitador del aprendizaje y un orientador del estudiante (Cotano, 2005). Teniendo en cuenta que, en el campo de la Química, una buena formación en la parte experimental es fundamental para la inserción laboral de los estudiantes, consideramos que es en esta parte de la asignatura en la que debemos trabajar este cambio de rol. Esta metodología permite al alumno comprobar el grado de asimilación de los contenidos teóricos, ayudándole, además, a desarrollar competencias específicas de la asignatura, y a adquirir una serie de competencias transversales, convirtiéndole en protagonista activo de su educación (Villa Sánchez y Villa Leicea, 2007; Ortiz-Salmerón, Andújar-Sánchez, Ureña-Amate y Socias-Viciana, 2019).

¿QUÉ HIZO?

Se aplicó la metodología de aula invertida a la parte práctica de una asignatura de Máster.

¿CON QUIÉN LO HIZO?

Este estudio se ha desarrollado durante el curso académico 2018/2019 con estudiantes de la asignatura de Cromatografía del Máster en Laboratorio Avanzado de Química de la Universidad de Almería (España). Esta asignatura se encuadra dentro del módulo obligatorio de la titulación, correspondiéndole 3 créditos ECTS (75 horas), de los cuales, 22,5 son presenciales y 52,5 no presenciales. De las 22,5 horas presenciales, 7,5 horas se dedicaron a las sesiones prácticas de laboratorio.

¿CÓMO LO HIZO?

Se le hizo entrega de todo el material de apoyo a los alumnos a través de la plataforma virtual Blackboard (presentaciones en Power Point, videotutoriales, fichas de reactivos, manuales de instrumentación, artículos científicos, etc.) previo a la clase presencial en el laboratorio. A partir de este momento la labor del profesor queda relegada a la supervisión/orientación del trabajo autónomo realizado por el estudiante, así como a la resolución de las posibles dudas surgidas durante el proceso.

¿DÓNDE LO HIZO?

El desarrollo de la metodología se llevó a cabo a través de la plataforma Blackboard para la parte no presencial y en el Laboratorio de Química Física del Edificio de Química de la Universidad de Almería (España) para la parte presencial de la asignatura.

¿QUÉ OBTUVO?

Para poder determinar la validez/utilidad de la aplicación de la metodología de aula invertida en la asignatura se ha realizado un seguimiento de la evolución del aprendizaje por parte de los estudiantes, así como la elaboración de una encuesta para conocer su grado de satisfacción. El seguimiento de la evolución del aprendizaje se ha realizado mediante una evaluación continua en las sesiones presenciales, así como la elaboración de un informe final donde aplicar todos los conocimientos adquiridos en la asignatura. Para la evaluación de este informe se utiliza una rúbrica que recoge los siguientes criterios:

1.- Entrega en la fecha establecida

2.- Aspectos formales del trabajo

3.- Desarrollo de la parte experimental

4.- Resultados y discusión de los experimentos

5.- Tablas y figuras

6.- Bibliografía

Los resultados obtenidos, muestran que la calificación media de los estudiantes fue de 9,09 puntos sobre un máximo de 10, siendo el desarrollo de la parte experimental donde se alcanza la mayor puntuación.

Una vez terminadas las sesiones prácticas y teóricas se les pasó a los alumnos la encuesta de valoración. En ésta, se realizaban preguntas relacionadas con el material aportado inicialmente, utilización de la plataforma virtual y dispositivos móviles, así como su opinión sobre esta nueva metodología, comparándola con el método tradicional utilizado hasta la fecha.

Se puede concluir que la aplicación de la metodología de aula invertida supone una mejoría considerable tanto en la adquisición de conocimientos por parte de los estudiantes como en el desarrollo de competencias necesarias para su inserción laboral.

¿QUÉ VENTAJAS ENCONTRÓ?

Con esta metodología se involucrará a los estudiantes en un aprendizaje autodirigido fuera del aula antes de la realización de las prácticas de laboratorio, consiguiendo con ello: una mayor personalización del proceso de aprendizaje del alumno, fomentando la creatividad y el pensamiento crítico. Este tipo de metodología permite además a los docentes crear un ambiente de aprendizaje en el aula, convirtiéndola en un espacio de trabajo activo para todos los miembros de la comunidad educativa presentes, facilitando el cumplimiento de las normas al eliminar algunos de los riesgos que potencian su incumplimiento, aportando más libertad al profesor. Los resultados obtenidos de la encuesta muestran que un elevado porcentaje de estudiantes (superior al 90%) elegirían esta nueva metodología para las asignaturas cursadas, reconociendo una mayor adquisición de conocimientos.