Francisco Jesús Vieyra González

Modelo hibrido para la capacitación y evaluación en competencias según el CONOCER

Datos Generales
Prácticas educativas mediadas por tecnología
Reporte de práctica
Licenciamiento Creative Commons
Atribución-CompartirIgual
Comunicación

Francisco Jesús Vieyra González

Coordinación de certificación en competencias, UNUM CORDIS AC.

¿CUÁLES SON LOS ANTECEDENTES?

Igual que en las instituciones escolares, el COVID 19 impactó significativamente las áreas responsables de los procesos educativos de tipo no formal como los centros de capacitación, universidades corporativas, sociedades civiles, religiosas y cualquier otra, ya que tuvieron que adaptarse a una otra realidad, donde la mayoría de las ocasiones, no contaban con las herramientas y competencias para establecer funciones y procesos a y con distancia.

Una de ellas fue la asociación civil Unum Cordis que ofrece servicios de capacitación y evaluación conforme a los criterios y procesos de la Universidad Tecnológica Fidel Velázquez (UTFV) y el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER) con la intención de certificar las competencias laborales en el estándar EC0217 Impartición de cursos de formación del capital humano de manera presencial grupal.

Los lineamientos de cumplimiento y calidad del CONOCER son estrictos al valorar los conocimientos, desempeños, actitudes, valores y hábitos de un candidato, considerando que en el estándar EC0217 el candidato debe impartir una sesión de clases de manera presencial a por lo menos cuatro estudiantes, lo que implicó un reto debido a las limitaciones impuestas a las reuniones físicas.

¿QUÉ HIZO?

Establecer un proceso de capacitación hibrido y de aprendizaje inverso empleando la herramienta de videoconferencia Zoom y el correo electrónico que facilitó la construcción de conocimientos, habilidades, desempeños y actitudes para la impartición de cursos presenciales de capacitación.

Además, se apoyó en la gestión educativa con recursos didácticos para la formulación de productos, el llenado de formatos y el cumplimiento de requisitos con respecto a la evaluación presencial del EC0217[1] del CONOCER.

¿CON QUIÉN LO HIZO?

Los usuarios de un proceso de certificación pueden pertenecer a un grupo en particular que comparta características o al público en general que desea comprobar el dominio de la competencia. Conforme a la normatividad del CONOCER, para establecer una evaluación objetiva, es fundamental que el instructor de capacitación y el evaluador sean personas distintas con roles que no pueden compartir.

El proceso de capacitación en la modalidad hibrida tenía quince personas entre los 25 y los 50 años, con variedad de perfiles como estudiantes de Pedagogía, instructores de capacitación y docentes de nivel superior. La evaluación individual fue con nueve de los estudiantes del curso, que proporcionaron el espacio, acompañantes y productos.

¿CÓMO LO HIZO?

En las certificaciones del CONOCER existe un documento llamado “estándar” que determina y guía al candidato de manera específica sobre los conocimientos, procedimientos, productos, hábitos, actitudes y valores que debe demostrar conforme a una función particular, además comparte los criterios de valoración, por lo que es fundamental para esta actividad al brindar el marco curricular y evaluativo.

La capacitación consistió en cuatro sesiones de cuatro horas donde se empleó un modelo de trabajo basado en el aprendizaje invertido, que a diferencia del aula invertida donde se brinda conceptos por videos y se aborda la práctica en la clase, en el también conocido “flipped learning” “los profesores cuentan menos rollo y pregunten más, y los alumnos adoptan un papel más activo” al abordar aspectos prácticos y trabajo grupal durante la presencialidad. (Prieto, 2017).

Se utilizó el sistema de conferencia online Zoom para impartir los contenidos disciplinares y teóricos como estilos de aprendizaje, tipos de estudiantes, técnicas grupales e instruccionales, dinámica de grupos, teorías de aprendizaje, entre otros; además el uso del correo electrónico facilitó una atención personal.

Las actividades prácticas como el volumen de la voz, la mirada hacia los participantes, el dominio del espacio, manejo de materiales didácticos como el videoproyector, postura corporal, etc. se trasladaron a la presencialidad al observar que no se podía realizar de manera óptima por las limitaciones tecnológicas. Así se impulsó un modelo de educación hibrida que “requiere tanto distribuir los contenidos entre plataformas y clases presenciales como desarrollar modelos de enseñanza y aprendizaje que permitan capturar la atención y el interés de los estudiantes por aprender” (Arias, 2020: 1)

Con respecto a la evaluación, se siguió el mismo proceso, donde se les compartió previamente manuales y pequeños vídeos mediante correo electrónico para reforzar sus conocimientos y para el llenado de formatos o documentos de las actividades administrativas y algunos recursos para los productos a entregar, debido a que el CONOCER prohíbe compartirles productos terminados o realizar con los usuarios aquellos que se entregarán a su evaluador.

¿DÓNDE LO HIZO?

De manera digital en la aplicación de videoconferencia de Zoom y compartiendo recursos didácticos mediante correo electrónico, a nivel presencial en las instalaciones de Unum Cordis AC. en Naucalpan, México.

¿QUÉ OBTUVO?

Principalmente se impulsó un aprendizaje más integral y de calidad donde se abordan aspectos teóricos y prácticos conforme al estándar de impartición de cursos presenciales siendo más eficientes los aprendizajes y recursos económicos, materiales, infraestructura y de tiempo de los integrantes de la institución y de los candidatos.

¿QUÉ OBTUVO?

Tradicionalmente los procesos de capacitación se desarrollan de manera presencial, por lo que trasladarlos a una práctica en modalidad hibrida y aplicando el aprendizaje inverso permitió desarrollar un nuevo estilo institucional para la oferta educativa acorde a las necesidades de los usuarios y alcanzando a personas que por cuestiones de tiempo y distancia no pueden acceder a procesos de capacitación y certificación.

¿QUÉ VENTAJAS ENCONTRÓ?

Se presenta una forma de impartir las acciones de formación con mejores resultados, ya que la totalidad de estudiantes obtuvieron el resultado de competentes y su certificado con valor oficial de la Secretaría de Educación Pública y el CONOCER.

REFERENCIAS

Arias, E., Brenchner, M., Perez, M. y Vasquez, M. (2020). De la educación hibrida: 4 elementos clave para hacerla realidad. Banco Interamericano de Desarrollo. Recuperado de https://bit.ly/3wybtMB

Basabe, P. F. (2007). Educación a distancia en el nivel superior. México, D. F.: Trillas

CONOCER (2012). Estándar de competencia en EC0217. Impartición de cursos de formación del capital humano de manera presencial grupal. México: SEP.

Prieto, A.(2017). Flipped learning. Aplicar el modelo de aprendizaje inverso. España: Narcea SA. De Ediciones.

Rama, C. (2020). La nueva educación hibrida. México: Unión de Universidades de América Latina y el Caribe.

Touron, J., Santiago,R. y Díez, A. (2014). The flipped classroom: Cómo convertir la escuela en un espacio de aprendizaje. España: Digital Text.

 

Sobre los autores

El portafolio electrónico para sistematizar el aprendizaje

Datos Generales
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Comunicación

MGAAV Francisco Jesús Vieyra González

 

Licenciatura en Pedagogía, Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

 

Diseñador instruccional en Lottus Education

 

¿CUÁLES SON LOS ANTECEDENTES?

Uno de los programas académicos impactados por la pandemia de COVID 19 fue la Licenciatura en Pedagogía de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, en particular la asignatura Diseño y elaboración de recursos didácticos, donde surge la presente experiencia, al implementar el trabajo remoto, debido al distanciamiento social que se debe aún cumplir para evitar la propagación del virus SARS-CoV-2

Para facilitar la planeación, organización y entrega de los diversos recursos y materiales educativos, se implementó el portafolio electrónico como herramienta que sistematiza las evidencias de aprendizaje y conocimientos de los estudiantes, además que permite al docente su revisión, realimentación correctiva y calificación, impulsando una evaluación objetiva. Un portafolio digital, también conocido como e-portafolio, que consiste en

espacios de aprendizaje y trabajo digitales de propiedad de los estudiantes para recopilar, crear, compartir, colaborar, reflexionar sobre el aprendizaje y las competencias, así como almacenar las retroalimentaciones y evaluaciones recibidas. Son plataformas que los estudiantes deben diseñar para implicarse en su desarrollo personal y profesional, e interactuar activamente con las comunidades de aprendizaje y los diferentes agentes implicados en el proceso de aprendizaje. (Pujolà, 2019, p. 7)

Tradicionalmente consta en un folder físico donde se guardan las evidencias para entregarlas al docente, aunque con las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), principalmente de la web, permite generarlos en un entorno virtual para acceder fácilmente por cualquier usuario, divulgar su contenido, favorecer la creatividad e impulsar la sociedad del conocimiento.

Existen diversas formas para utilizarse como un medio de evaluación que sirve al docente para emitir un juicio acorde a ciertos criterios, aprendizaje por ser el estudiante el responsable de su construcción y publicación, gestión al facilitar los procesos de transferencia, además de divulgación al compartir con otros los avances logrados.

 

¿CÓMO LO HIZO?

La asignatura de Diseño y elaboración de recursos didáctico se imparte en el quinto semestre como parte de las opciones del área pedagógica. Se conforma de dos ejes de trabajo, por un lado, la revisión de los referentes teóricos con criterios pedagógicos, tecnológicos, disciplinares, gráficos y económicos y, por otro, la construcción mediante herramientas digitales de recursos y materiales impresos, auditivos, multimedia y digital conforme a los contextos, el objetivo de aprendizaje y la población a implementar.

Las evidencias de aprendizaje consisten en materiales y recursos didácticos; los primeros son objetos creados desde su origen con una intención educativa como puede ser una infografía educativa o un manual de capacitación, a diferencia de los otros que son recuperados de la cotidianidad para adaptarlos e implementarlos con una intención educativa, por ejemplo, el uso de una piedra para ejemplificar la aceleración en la gravedad.

Cada uno de los recursos y materiales son construidos con herramientas digitales de acceso libre, versiones limitadas o licencia Creative Commons, al igual que otras evidencias propias de la clase como un cuadro comparativo de los conceptos material, recurso, medio u objeto de aprendizaje y una presentación digital para exponer las teorías.

Debido a las restricciones para evitar la propagación del COVID-19, las clases se desarrollaron mediante Zoom, donde los estudiantes presentaron con apoyo de su docente los 16 temas que corresponden al programa de la asignatura y, mediante videotutoriales elaborados con la herramienta Screencast-O-Matic y publicados en Youtube, se les compartieron los procesos de construcción de cada uno de los recursos y materiales a entregar.

Un problema fue la cantidad de evidencias, complicando su organización y sistematización, por lo que se solicitó a los estudiantes un portafolio digital, similar a un repositorio personal. La herramienta empleada fue Google Sites, que es un servicio gratuito de creación de páginas web mediante plantillas predefinidas y con funcionalidades intuitivas y accesibles que facilitan su construcción e incrustar objetos externos. 

 

Imagen 1. Estructura del portafolio digital. Elaboración propia.

Portafolio 1

El portafolio incluyó información complementaría que sustentar las evidencias, por lo que en cada página debía incluir un título, una breve explicación del contenido, los pasos realizados y las fuentes de consulta. Con respecto al tema de los recursos y la interfaz, los estudiantes tomaban las decisiones conforme a la población impactada, los aprendizajes a desarrollar y su creatividad.

 

¿QUÉ OBTUVO?

Se obtuvieron 22 portafolios digitales con la misma estructura, pero con contenidos diferentes que demostraron los abordajes tecnológicos, pedagógicos y disciplinares en sus recursos y materiales educativos.

 

Imagen2. Recursos didácticos. Recuperado de https://cutt.ly/sbn7Zef

Portafolio 2

 

 

Imagen3. Recursos didácticos. Recuperado de https://cutt.ly/ybQeCFd

Portafolio 3

 

 

Los procesos de evaluación se desarrollaron por el docente con listas de cotejo y rúbricas que contenían los criterios a valorar, aunque fueron compartidos con los estudiantes mediante SlideShare para que se autoevaluarán con la intención de juzgar su desempeño, entregar lo solicitado y obtener la mayor calificación. 

 

¿QUÉ VENTAJAS ENCONTRÓ

El portafolio digital es un recurso importante para sistematizar las evidencias de trabajo y los conocimientos, generando un aprendizaje activo y autónomo en los estudiantes, impulsando un alto nivel de calidad por su publicación en un sitio web que permite ser consultado por cualquier persona, así se trasciende del aula a espacios de divulgación y promoción del profesionista y de la misma institución. Las ventajas de su aplicación son:

  • Documentar sus conocimientos y evidencias de aprendizaje.
  • Construir una huella digital y profesional con visibilidad a otros usuarios.
  • Sistematizar las evidencias para facilitar su construcción y entrega.
  • Acceder fácilmente para revisarlos en la web en cualquier momento.
  • Desarrollar la creatividad y toma de decisiones para un aprendizaje integral.
  • Favorecer la autenticidad de los productos evitando el plagio.
  • Promover una comunidad de aprendizaje, al revisar sus evidencias entre sí.

En esta época de pandemia, donde la interacción educativa se desarrolla mediante una TIC, el portafolio digital es una herramienta confiable que permite generar experiencias de aprendizaje significativas con relación a los contenidos del programa académico y competencias como la organización, sistematización, responsabilidad y respeto a los derechos de autor, por lo que es recomendable su implementación considerando las condiciones y limitaciones tecnológicas, institucionales, educativas, económicas y personales de los estudiantes.

 

REFERENCIAS

Pujolà, J. (2019). El portafolio digital en la docencia universitaria. Barcelona: Consejo Editorial IDP/Ice-Octaedro